Tras la operación policial en Río de Janeiro que dejó más de 120 muertos, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva llamó a un accionar conjunto de las fuerzas de seguridad para enfrentar al crimen organizado.
Lula condenó la violencia y pidió coordinación entre las fuerzas
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó que “no podemos aceptar que el crimen organizado siga destruyendo familias, oprimiendo a los residentes y esparciendo drogas y violencia por las ciudades”, en referencia a la Operación Contención, desplegada por la policía en Río de Janeiro y que dejó alrededor de 120 muertos.
A través de sus redes sociales, Lula señaló que ordenó al ministro de Justicia y al director general de la Policía Federal viajar a Río para reunirse con el gobernador del estado y analizar la situación.
“Hay que llegar a la columna vertebral del narcotráfico”
El mandatario brasileño destacó la necesidad de un trabajo conjunto y estratégico entre las distintas fuerzas de seguridad para combatir las redes delictivas.
“Necesitamos un trabajo coordinado que llegue a la columna vertebral del narcotráfico sin poner en riesgo a policías, niños y familias inocentes”, manifestó Lula.
El presidente recordó que, en agosto, su gobierno realizó la mayor operación contra el crimen organizado en la historia del país, que logró alcanzar el corazón financiero de una gran pandilla involucrada en tráfico de drogas, adulteración de combustible y lavado de dinero.
Avance legislativo para fortalecer la seguridad
Lula también destacó el avance de la Propuesta de Enmienda Constitucional (PEC) de Seguridad, enviada por el Ejecutivo al Congreso Nacional, que busca garantizar la cooperación entre las distintas fuerzas policiales para enfrentar a las organizaciones criminales de manera integral.
“Con la aprobación de la PEC de Seguridad, garantizaremos que las diferentes fuerzas policiales actúen de manera conjunta para enfrentar a las facciones criminales”, aseguró el presidente.
